Heridas emocionales:miedo al abandono

En este apartado y en los siguientes estaremos tratando de nuevo algo que ya mencionamos que serian las heridas emocionales. Que estas pueden generarse desde nuestra infancia pero al no comprender del todo lo que pasa por estar en una edad inmadura de la vida, cuando crecemos es como si saliera a flote todo aquello que nos lastimo en nuestra etapa mas inocente, gracias a esto comenzamos a crear nuestras mascaras de protección o mascaras emocionales, y con esto también desarrollamos actitudes o cosas en nuestra personalidad para no demostrarnos débiles cuando se nos vuelven a presentar estas heridas.

Comencemos con la herida del “miedo al abandono”, son las personas que  han experimentado el abandono en su infancia, por lo que consideran la soledad como su mayor enemigo. Se encuentran en constante vigilancia para no quedarse solos, podemos hablar que utilizan la dependencia como mascara. Pero no por eso no dejan de tomar la iniciativa de abandonar a los demás por temor a revivir la experiencia, como mecanismo de protección. Cabe destacar que su mayor temor es afrontar una separación, de forma que las relaciones son vividas con dosis de inseguridad, miedo y recelo, siendo más vulnerables a la creación de vínculos de dependencia afectiva.

Si este problema en los vínculos no se trata, es muy posible que la persona acabe padeciendo los siguientes efectos nocivos para su salud mental: 

1. Relaciones difíciles con compañeros y parejas románticas
2. Baja autoestima
3. Problemas de confianza
4. Problemas de ira
5. Cambios de humor
6. Dependencia emocional
7. Miedo a la soledad

El miedo al abandono no es solo el temor a que los demás nos rechacen o dejen, sino el temor a que tu bienestar, tu autoconcepto y tu propia autoestima salga dañada debido a los comportamientos de los demás. Es decir: tu bienestar está dependiendo de lo que no puedes controlar.

Esta herida emocional con el paso del tiempo nos hace convertirnos en personas codependientes, que se se aferran a la primera persona que nos demuestra cariño, nos volvemos obsesivos y creemos que la felicidad solo depende de si estamos o no con esa persona, es muy común que a nuestra edad desarrollemos algo así, en nuestra primera relacion romántica o en el primer descubrimiento del llamado enamoramiento. No es lindo que tu vida y bienestar comiencen a depender de alguien, pues te descuidas en todos los aspectos, y casi te quieres morir cuando algo no te sale bien en tus relaciones amorosas y con esto descuidas tu amor propio, que ante todo es lo único que debería importarte. Pero claro es inevitable sentir miedo por perder a alguien como en alguna vez de nuestro pasado.